CRÓNICA:

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La 91 edición de los Premios Oscar arrancaba con una alfombra roja que esperaba con ansia la entrada triunfal de Lady Gaga. Como si de una 'estrella' de los años 60' se tratase, la nominada al Oscar a mejor actriz aparecía deslumbrante en el Teatro Dolby de Los Ángeles con un look homenaje aAudrey Hepburn.

Charlize Theron, Viggo Mortensen, Amy Adams, Rodrigo Sorogoyen, Bradley Cooper e Irina Shayk pisaron con fuerza la alfombra de unos galardones que se alejan ya de los #OscarSoWhite que tantas críticas generaron en ediciones anteriores. 

 

Los primeros grandes premios de la noche así lo demostraron. Regina King y Mahersala Ali se llevaban el Oscar a mejor actriz y actor de reparto por 'El blues de Beale Street' y 'Green Book' respectivamente. Y aún más. Con un alegato absolutamente incendiario, Spike Lee, ganador al Oscar a mejor guión adaptado por 'Infiltrado en el KKKlan', protagonizaba el primer discurso político de la noche. 

El 'momentazo' de la noche (y el más comentado en redes sociales) fue ver a Bradley Cooper y Lady Gaga subiendo al escenario para interpretar 'Shallow'.No pasó desapercibida la escasa química que proyectaba el director de 'Ha nacido una estrella', a pesar del esfuerzo de la cantante por mostrar esa complicidad que sí vimos en los cines.

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Sin maestro de ceremonias por primera vez en 30 años, la noche pasaba rápido y sin sorpresas. Todo giraba sobre lo esperado: ver a Lady Gaga recogiendo el Oscar a mejor canción y a Rami Malek convertise en el mejor actor del añogracias a su magnífica interpretación al meterse en la piel de Freddie Mercury. Otro nombre cantado: Alfonso Cuarón. 

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El cineasta mexicano se hizo de nuevo con el Oscar a mejor dirección por 'Roma' (ya se lo llevó por 'Gravity' en 2014). Muy emocionado, se lo dedicaba a las actrices Yalitza Aparicio y Marina de Tavira, quienes en sus palabras "son verdaderamente la película" (las dos estaban nominadas en las categorías de interpretación, pero ninguna se ha llevado la estatuilla).

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Menos esperado fue ver a Olivia Colman arrebatándole la gloria a Glenn Close, que por séptima vez se va de vacío a casa (al estilo Amy Adams). Un Oscar que salvó la noche de 'La Favorita'.

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La gala llegaba a su fin y España, de nuevo, se quedaba sin Oscar. 'Madre', el corto de Rodrigo Sorogoyen, no fue suficiente frente a 'Skin'. El toque 'made in Spain' lo pusieron el chef José Andrés y Aridna Gil, que acudió para acompañar a Viggo Mortensen, nominado a mejor actor por 'Green Book'.

Y fue precisamente 'Green Book' la que restó protagonismo a 'Roma' después de que Julia Roberts anunciase que se convertía en la mejor cinta del año. Peter Farrelly, director, subía al escenario junto con su equipo al completo para recoger un premio que demuestra que la Academia apuesta por historias comprometidas y reales que se alejan del muro de Trump. Y por si quedaba alguna duda del espíritu 'hollywoodense', hagan caso a cada una de las palabras de los premiados: si tienen un sueño, vayan a por ello.

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SEDE:

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La 91ª ceremonia de entrega de los Premios Oscar está a la vuelta de la esquina y todo está listo en el Dolby Theatre de Los Ángeles, donde ya es toda una tradición que se celebre la gala cinematográfica más esperada, para que la velada sea un éxito.

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CONCLUSIÓN:

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Voy a empezar hablando de la elección de la sede, donde observamos que se han decantado por un destino tradicional para la celebración de esta gala.

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Sobre la repercusión decir que como siempre es una gala que tiene mucha repercusión y de la que todo el mundo habla y comenta. Tanto en redes sociales, televisión, prensa, revistas, etc se habla de ello y cada uno opina de porque ese actor se ha llevado el premio y porque no, porque la elección de mejor película es esa, etc.

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Todo el mundo espero el momento del que al final más se ha hablado, y en el que todo el mundo ha sido encandilado como es la canción "Shallow" interpretada por Bradley Cooper y Lady Gaga, el cual fue el más comentado en redes sociales entre otro medios.